MONUMENTOS DE ESPAÑA
La Fuente de El Caño es un monumento situado en el municipio español de Torrelodones, en la parte noroccidental de la Comunidad de Madrid. Fue levantada en el siglo XVI, en el contexto de las infraestructuras acometidas en la vertiente suroeste de la Sierra de Guadarrama, donde Torrelodones se ubica, durante la construcción del Monasterio de El Escorial.
Según consta en el archivo histórico del Ayuntamiento de Torrelodones, en el último tercio del siglo XVI las autoridades municipales decidieron sustituir la vieja fuente del pueblo por otra más artística, para hacer más agradable la estancia del rey Felipe II. El monarca pernoctaba con frecuencia en la localidad, en un primer momento en el Mesón de Francisco de Baños y, posteriormente, en el Real Aposento de Torrelodones, en sus desplazamientos desde Madrid hasta el Monasterio de El Escorial.
El proyecto corrió a cargo de Gaspar Rodríguez, ayudado por Juan Aguado,1 maestro de albañilería que había trabajado en la construcción del citado monasterio. No hay referencias sobre las fechas exactas de las obras, aunque se sabe que la fuente ya estaba finalizada en el año 1591.2
La fuente recoge fielmente las corrientes herrerianas surgidas con la construcción del Monasterio de El Escorial y que se extendieron rápidamente por las comarcas madrileñas de la Sierra de Guadarrama, a lo largo de las últimas décadas del siglo XVI.
Está realizada enteramente en piedra de granito, tallada en sillares regulares. Presenta cuerpo rectangular, coronado por un frontón, con moldura saliente y rematado en sus vértices por tres bolas, elemento decorativo muy utilizado en la arquitectura rural guadarrameña.
Los ornamentos son escasos y se limitan a la presencia en el frontispicio de un escudo de la Casa Ducal del Infantado y del Condado del Real de Manzanares, al que pertenecía el pueblo; y a diversos juegos geométricos labrados sobre la piedra.
El conjunto se completa con un pilón rectangular, alimentado por dos caños. En 1984, la fuente fue trasladada de lugar, para ocupar el centro de una rotonda urbana, bautizada como Plaza de El Caño. Al mismo tiempo, le fueron añadidas dos extensiones laterales semicirculares, diseñadas por el pintor Manuel López-Villaseñor, en las que, a modo de exedra, se dispusieron asientos.
La fuente del Zacatín o fuente del barranco es una fuente del municipio de Colmenar de Oreja, Comunidad de Madrid, España.
La fuente está situada al sur de la plaza Mayor de Colmenar de Oreja (40°06′24.2″N 3°23′14.8″O), se encuentra frente al Arco de Zacatín, en la ladera del barranco que en el pasado separó el núcleo urbano de Colmenar de sus Arrabales. Se accede a la misma atravesando el túnel que, desde el Zacatín, atraviesa la Plaza Mayor, o desde la propia Plaza Mayor saliendo por el portillo de Mortal.
La fuente de Ventura Rodríguez, también llamada de los Tres Caños, es un monumento de estilo neoclásico, situado en el municipio español de Boadilla del Monte, en la comunidad autónoma de Madrid. Fue levantada en el último tercio del siglo XVIII, a partir de un diseño del arquitecto Ventura Rodríguez, de quien toma su nombre.
La fuente fue proyectada en 1763, como uno de los elementos más destacados del jardín frontal del Palacio del Infante don Luis, donde residió Luis Antonio de Borbón y Farnesio, hijo de Felipe V y hermano de Carlos III, entre 1765 y 1776. Al igual que el citado edificio, fue concluida en el año 1765.1
Fue erigida en las inmediaciones de la fachada principal del palacio, formando eje con su puerta de acceso. Presidía un recinto ajardinado, que desapareció con la expansión urbana de Boadilla del Monte. Sobre su solar se extiende actualmente una calle y una plaza.
Junto a la fachada posterior de la residencia palaciega, se alzaba otra fuente, la de las Conchas, diseñada igualmente por Ventura Rodríguez y trasladada a los jardines del Campo del Moro de Madrid, en 1844.
La fuente y su entorno fueron objeto de una adecuación y rehabilitación en el año 1991.
La fuente fue concebida como un depósito de agua, cuya misión era regular el suministro a las distintas dependencias del palacio, a los jardines y a las restantes fuentes, con los que tenía comunicación subterránea. Esta función determinó tanto su emplazamiento, a espaldas de un pequeño cerro, como su trazado, a modo de gran cubo.
En la cara posterior de la estructura, la más funcional, se oculta un aljibe, mientras que en la anterior, que se enfrenta a la puerta principal del palacio, Ventura Rodríguez ideó una solución monumental. Esta última consta de tres cuerpos principales, realizados en sillares de granito, y de dos laterales, hechos en revoco, que se unen en la parte superior mediante una cornisa corrida. Cuatro pilastras planas, rematadas por capiteles toscanos, separan las diferentes partes.
Los cuerpos de piedra alojan tres hornacinas, formadas por veneras de cuarto de esfera. La hornacina central es la de mayor tamaño y, en su interior, hay instaladas dos pilas, sobre las que arroja agua un mascarón. Este esquema se repite en las hornacinas de los lados, si bien el número de pilas se reduce a uno.
El conjunto se completa con un pilón de granito, que rodea la base. Su planta rectangular queda rota en los extremos mediante dos cuartos de círculo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario