lunes, 28 de junio de 2021

HISTORIA DE ESPAÑA

 SIGLO XIII EN ESPAÑA

Maestro Enrique (muerto en Burgos en 1277)1​ es la denominación que dan las fuentes medievales al maestro de obras al que se deben buena parte de la traza y algunos elementos escultóricos de las catedrales de Burgos y de León. Se supone que provenía de Francia, donde habría aprendido y, probablemente, desarrollado su oficio.

Se especula con la posibilidad de identificarlo con el maestro anónimo que realizó, entre otras intervenciones en edificios de la región de Île de France, una fase de las obras de la basílica de Saint-Denis entre 1231 y 1245, por iniciativa de la reina Blanca de Castilla (madre de San Luis); y que sería la relación de ésta con el rey Fernando III el Santo (su sobrino) la causa de que se trasladara a Castilla en para reiniciar las obras de Burgos en 1250 (estaban paradas desde la década anterior) y comenzar las de León, que eran de nueva planta (y son las que presentan mayor uniformidad de estilo con el Gótico radiante francés).


Grupo de la Anunciación, portada del claustro de la catedral de Burgos.







El Cristo de Mig Aran es una talla de madera fragmentada policromada de estilo románico del siglo XIII, y se encuentra en la iglesia de Sant Miquèu a Vielha (San Miguel de Viella). Por cálculos llevados a cabo con el busto que queda se cree que la figura entera podría medir alrededor de dos metros de altura. Marcel Durliat en el año 1978 ya informó de su gran calidad:

...este hermoso Cristo mutilado, cuyo expresivo rostro es una de las obras maestras de la escultura en madera de la región de los Pirineos


Cristo de Mig Aran
Crist de Mijaran.jpg
AutorAnónimo
CreaciónSiglo XIII
UbicaciónIglesia de San Miguel de Viella, Viella Mitg Arán (Lérida)

Historia[editar]

El cristo de Mig Aran en una fotografía de 1907.

La imagen pertenecía a la antigua iglesia de Santa María de Viella, destruida durante la Guerra Civil Española. Formaba parte de un conjunto escultórico del «Descendimiento» similar a los existentes en el Valle de Boí. Se atribuye su realización al «taller de Erill», conocido por ser que elaboró el Descendimiento de Erill la Vall, el mejor conservado en Cataluña de época románica y que pertenecía a la iglesia de Santa Eulalia de Erill-la-Vall. Los rasgos más cercanos entre ambos cristos aparecen en la similitud de su rostro en los pómulos altos, el largo de su nariz, sus cejas altas y la frente poco elevada, les distinguen que en el de Mig Aran el bigote está completamente horizontal sobre su labio superior y la barba recogida en unos rizos bien marcados, los pechos más marcados y con los pezones no aparecen en el de Erill.2​ Se dice también que este Cristo aranés fue posterior al de Erill, por su perfeccionada técnica y estilo. La escultura desapareció durante la guerra civil española, siendo localizada en Suiza en 1940 y devuelta al Valle de Arán.

El resto de figuras que debían pertenecer a este descendimiento (entre cinco o siete), se cree que debieron desaparecer o ser destruidas en el año 1472, cuando la antigua iglesia donde se encontraba fue saqueada en un invasión francesa.

Descripción[editar]

Se encuentra en culto y situado en la segunda capilla de la derecha de la iglesia de San Miguel, protegido por una exposición en una vitrina cerrada con condiciones idóneas de temperatura e iluminación.3​ Se conserva el fragmento de la escultura que representa la cabeza con un trozo de torso hasta el nivel de la cuarta costilla. Se encuentra decantado a un lado, tiene el rostro con los ojos cerrados y expresión de paz; las finas hebras de su cabello le caen sobre los hombros en tres mechas trenzadas en línea zigzagueante, tiene bigote y unos señalados rizos en la barba. El torso está sin resto de brazos y la mano de José de Arimatea lo sostiene por la axila.4​ La pérdida de los brazos se considera casi natural ya que estaban sujetos por medio de elementos que permitían su movimiento y su conservación podía ser bastante frágil. Lo que parece un hecho inusual es la desaparición del resto del cuerpo, ya que se observa un corte limpio e incluso existe un vaciado bajo el esternón, cuya causa no ha sido posible averiguar.






El Cristo de Vilanova dos Infantes es una talla románica ubicada en la Iglesia de San Salvador de Vilanova dos Infantes, en CelanovaOrense (GaliciaEspaña).

La imagen, tallada en madera probablemente a finales del siglo XII o tal vez a principios del siglo XIII (algunas fuentes afirman hacia 1220),1​ constituye una de las cuatro estatuas románicas de Cristo crucificado existentes en la provincia, destacando por encima de ellas al ser considerada la más antigua de toda Galicia.

Cristo de Vilanova dos Infantes
Cristo de Vilanova dos Infantes.jpg
CreaciónSiglos XII o XIII
UbicaciónVilanova dos InfantesCelanova
EstiloRománico
MaterialMadera policromada
Dimensiones1,85 metros de alto

Historia[editar]

En la comarca gallega se conservan muy pocas esculturas románicas de Cristo en la cruz, existiendo a día de hoy en Orense únicamente cuatro: el Cristo de Vilanova dos Infantes, el Cristo de los Desamparados (Catedral de Orense), el Cristo de San Salvador dos Penedos (Allariz) y el Cristo de Santa Eufemia de Ambía (Baños de Molgas).

Es probable que la talla custodiada en Vilanova dos Infantes proceda del monasterio femenino de Santa Clara,3​ fundado hacia el año 934 por la madre de San Rosendo, Santa Ilduara.2​ Actualmente puede contemplarse en la capilla mayor de la Iglesia de San Salvador, en la pared de la epístola.

Descripción[editar]

La escultura, de 1,85 metros de alto,1​ muestra una imagen a tamaño natural de Cristo en la cruz. Influenciada posiblemente por la escuela del Maestro Mateo y con claros matices bizantinos,4​ la talla presenta a Jesús sujeto a una cruz con forma de tronco de árbol, los pies separados con un clavo cada uno en vez de uno sobre otro y sujetos ambos con el mismo clavo (acorde al ideal realista de los Cristos románicos), y un semblante tranquilo y relajado, con los ojos abiertos y ninguna muestra de dolor, todo ello símbolo del triunfo sobre la muerte. Por su parte, los brazos están colocados de forma casi horizontal y los dedos de las manos aparecen completamente extendidos, destacando las costillas sobre el torso. El manto de pureza se halla anudado en la cadera y cae hasta las rodillas ligeramente flexionadas, mostrando una mayor longitud por la parte posterior. Destaca en esta imagen en particular la ausencia del suppedaneum,2​ donde la práctica totalidad de las figuras románicas de Cristo apoyan los pies.

Legado[editar]

Antiguamente objeto de romerías en su honor, en 2008 el Cristo de Vilanova dos Infantes fue exhibido en La Coruña con motivo de una exposición dedicada a Alfonso IX.5​ Del mismo modo, la imagen fue expuesta en el Museo del Mar de Galicia (Vigo) del 10 de octubre de 2017 al 4 de marzo de 2018, formando parte de la muestra Pergamiño Vindel. Un tesouro en sete cantigas. Según Alfonso Enríquez, párroco de Vilanova, la talla ha sido objeto de numerosas muestras en Orense y Santiago de Compostela a lo largo de 40 años.






La cruz de Piasca es una escultura gótica cruciforme proveniente de Liébana, esmaltada en limosinos, ejemplo destacado de la escultura de la época en CantabriaEspaña.1​ Se conservaba en Piasca, donde estuvo el monasterio de Santa María la Real, del cual queda la iglesia; pero tras muchas vicisitudes decidió trasladarse al Museo Diocesano, sito en Santillana del Mar, para su seguridad.2

Estilísticamente se encuentra en un estadio intermedio entre el Románico y el Gótico. Fue elaborada en el siglo XIII en LimogesFrancia, localidad cuyos talleres gozaron de grandísima fama durante la Edad Media. Se trata de una cruz doble de cobre dorado y esmaltada al champlevé. No se conserva entera, pues se han perdido los remates de los brazos.






Cruz del Rey Don Sancho

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Cruz del Rey Don Sancho en un dibujo del siglo xix

La "Cruz del Rey Don Sancho" es un monumento de la ciudad de Zamora (España), situado en el lugar donde, según la tradición, Bellido Dolfos asesinó al rey Sancho II, el 6 de octubre de 1072.1

Situación[editar]

Está situado junto a la carretera que conduce al municipio de La Hiniesta, en un cruce de carreteras al noroeste de la ciudad de Zamora. El paraje en el que se emplaza ha sido tradicionalmente vinculado con la ubicación del campamento del rey Sancho II durante el cerco de Zamora de 1072. El monumento está situado en el mismo lugar donde según la tradición, Vellido Dolfos asesinó al rey Sancho II, el 6 de octubre de 1072.2

Se tiene constancia que en el siglo XIII ya se encontraba colocada esta cruz en el lugar, pues de esta fecha data el responso que se reza todos los años el día de romería cuando la Virgen de La Concha se traslada a La Hiniesta.1

En el Catálogo Monumental de Ávila se habló de un menhir histórico: he aquí otro algo más antiguo y subsistente aún. Herido a traición el rey Sancho II, cuando sitiaba la ciudad en 1072 fue llevado a su tienda, donde murió luego. En memoria erigiose allí una piedra, que probablemente más tarde se remató con una pequeña cruz postiza, y a su pie veíase antes un montón de piedrecillas, que los caminantes iban arrojando en señal de haber dicho una oración por el alma del rey. Rota ya esta quizá remotísima costumbre, persevera el tosco monumento, al cabo de una llanada sobre el camino de La Hiniesta y a un kilómetro de la ciudad, que desde allí entera se descubre desde alto.1

Descripción[editar]

Gómez-Moreno la describe diciendo que "es de la pudinga cuarzosa del terreno mismo, cortada en forma de tronco de pirámide, con altura de 2,45 metros sobre tierra y base de 58 centímetros. La cruz es reciente, por haberse roto la de antes (en 1874 según Garnacho), asimismo de piedra”.1

La pieza en sí, está formada por un monolito labrado en forma de paralelepípedo de sección rectangular. En su parte superior se va estrechando para rematar en una cruz griega, que según Gómez-Moreno es posterior al monolito. En la cara norte se distinguen algunas letras, actualmente bastante borrosas, en la que se intuye una "A" en letra capital. Es muy difícil precisar si esta fue realizada en época románica, pues no hay indicios que lo confirmen. Aun así, algunos autores así la consideran.

 

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