SIGLO XV EN ESPAÑA
Íñigo Fernández de Velasco y Mendoza (1462 - 17 de septiembre de 1528), IV conde de Haro, III condestable de Castilla, II duque de Frías. Veterano de las guerras de Granada1 y de las Alpujarras. Uno de los primeros españoles condecorados con el Toisón de Oro. Camarero y copero mayor de Carlos I. Hijo de Pedro Fernández de Velasco y Manrique de Lara y Mencía de Mendoza.
Convirtió la iglesia de Santa María de Mercado de Berlanga en Colegiata.
Vida[editar]
Matrimonio con María de Tovar[editar]
Su padre le comprometió en matrimonio con María de Tovar tras llegar a un acuerdo con su tutor, el obispo de Cuenca. El fin era defender los derechos de María ante su hermano Juan y posteriormente de sus sobrinos que intentaban hacerse con la herencia de su padre, Luis de Tovar, con el falso pretexto de que el mayorazgo había excluido anteriormente a las hembras.2 En 1482 prepararon las capitulaciones matrimoniales, con la condición de que solicitasen al pontífice Sixto IV la dispensa matrimonial, que Pedro de Velasco diera anualmente a Íñigo 400 000 maravedís o en su defecto la villa de Villadiego y su merindad para sostener el matrimonio (ya que María aportaba al matrimonio la Casa de Tovar y las villas de Berlanga y Gelves, junto con la posibilidad de añadir otras), además de entregarle los lugares de Gandul y Marchenilla (situados en la campiña de Sevilla) una vez que falleciese Isabel de Cuadros, viuda de su tío Alfonso de Velasco. Las arras prometidas por Íñigo a María se fijaron en un millón de maravedís, que su padre se obligaba a pagar hipotecando Santo Domingo de Silos. Quince días antes del casamiento María recibiría todas sus ropas de vestir y aderezos según su estado y condición, así como las de sus dueñas y doncellas. Además el Obispo y Pedro concluyeron dejar en manos de Isabel la Católica las armas y apellido de los Tovar, que recibiría el primogénito del matrimonio.
Poco después de contraer matrimonio participó en la conquista de Granada, acompañando a la hueste de su padre.1
Disputas con su hermano por la herencia de su padre[editar]
Tras la muerte de su padre en enero de 1492, se enfrenta a problemas con su hermano Bernardino Fernández de Velasco y Mendoza por la herencia de su padre, ya que Bernardino se apoderó del testamento antes de que fuese sellado por el escribano, alterando algunas partes que dejaban a sus hermanos sin la legítima y los bienes de libre disposición que les había asignado su padre. Íñigo protestó exigiendo los lugares de Gandul y Marchenilla y la villa de Villadiego que habiéndole prometido su padre le había arrebatado su hermano. Aunque Bernardino se negó en un principio debido a que afirmaba que su padre la había declarado heredero universal de sus bienes, finalmente llegaron a un acuerdo, cuya clave era la posesión de Íñigo de los diezmos de la mar (entregados por su padre antes de morir en previsión de desavenencias con su hermano, a fin de que pudiese utilizarlos como garantía del cumplimiento de la herencia), ambicionados por Bernardino por los enormes ingresos que proporcionaba y que serían entregados a cambio. Gandul y Marchenilla interesaban a Íñigo porque añadía un territorio más a la villa de Gelves, aportado al matrimonio por la familia de su esposa.
Adquisición de propiedades[editar]
María de Tovar en 1495 heredó de su abuela Inés de Guzmán la villa de Villalba del Alcor (Huelva).
En 1502 los príncipes Felipe y Juana le concedían una renta de Copero Mayor de 40 000 maravedís anuales de ración y quitación.
María estaba interesada en hacerse con Osma para ampliar los territorios que ya poseía en Berlanga. En 1507 Diego López Pacheco, segundo marqués de Villena, agobiado por las deudas, decidió desprenderse de Osma, por hallarse lejos del centro de sus principales posesiones. María ya le había comprado en 1505 un juro que tenía en las villas de Burgo de Osma, Ucero, Cabrejas y Aguilafuente. El 10 de marzo de 1507 llegaron a un acuerdo para la compra de Osma. El 27 de abril Alonso de Arévalo en nombre de María de Tovar tomaba posesión de la ciudad de Osma y de las aldeas de Valdenebro, Valdevelascoluengo, Valdenaharros, Navapalos, El Olmeda, Lodares y Valcervalejo.
Creación de mayorazgo[editar]
El 26 de mayo de 1509 crea junto con su mujer un mayorazgo que incluye todas sus adquisiciones, para su primogénito Pedro, que debería tomar el apellido y las armas de los Tovar, reservándose durante sus vidas la posesión de estos bienes y la facultad de poder aumentar, alterar y fundar de nuevo el dicho mayorazgo. Este incluía las villas de Cuenca de Campos, Berlanga (con la casa llamada la Choza que habían construido en ella y otra casa de aposentamiento) y Gelves; los lugares de Gandul y Marchenilla; la ciudad de Osma y sus tierras; un juro de 112 500 maravedís sobre las villas de Burgo de Osma y los lugares de Husero y Cabrejas; y otro de 30 000 maravedís y cuarenta cargas de pan terciado situados sobre Villadiego dejado por el padre de Íñigo en su testamento. Este mayorazgo prohibía que se uniese con el de la Casa de Velasco y que en caso de fallecimiento del primogénito, pasaría a manos del siguiente hijo por edad y con preferencia de los varones, siempre que no hagan profesión de religión o entrada en orden religiosa salvo la de Santiago, ni fuese loco, ni mentecato, ni sordo, ni mudo, ni ciego, ni tullido de brazos o piernas, o gafo.
Este mayorazgo fue revocado en 1512 por sus fundadores.
Más adquisiciones y recepción del mayorazgo de los Velasco[editar]
En 1511 la reina Juana le concedía un juro de 200 000 maravedís en las alcabalas de la ciudad de Soria.
En 1512 falleció su hermano Bernardino Fernández de Velasco y Mendoza. Al carecer de sucesión masculina y por la prohibición impuesta por Pedro Fernández II de Velasco al crear su mayorazgo en 1458 de la recepción de éste por hembras, Íñigo heredó de Bernardino todos sus títulos y el mayorazgo de los Velasco. Como este último pasaría a su primogénito al fallecer Íñigo, María pidió a su marido la revocación del mayorazgo creado en 1509, para mantener separados los bienes de los Tovar de los de los Velasco, de forma que se conservase la memoria de su linaje, a lo que Íñigo accedió.
En 1513 compró a Pedro de Tablares la alquería de La Tejada y todas sus tierras.
Creación del mayorazgo de los Tovar[editar]
En 1517 María crea un mayorazgo para su segundo hijo Juan, que debería llevar las armas y el apellido de los Tovar y heredaría las villas de su linaje. Berlanga, Gelves, los lugares de Gandul y Marchenilla, la ciudad de Osma y el derecho de recuperar Astudillo.
Del mayorazgo fueron separadas Cuenca de Campos que fue vinculado por Íñigo al mayorazgo de los Velasco y Villalba del Alcor, que vendieron a su hijo Pedro por 13 333 333 maravedís.
En 1520 María incorporó al mayorzago la Torre y la casa que ella hizo en Osma, un juro de 112 000 maravedís sobre las rentas de Calahorra, las villas de Berzosa, Alcubilla, la Granja de Valdealbín y la villa de Fresno (comprada a Luis de la Cerda por 1 550 000 maravedís).
Toisón de Oro, adquisiciones y ventas[editar]
En 1518 Carlos I le entregó el Toisón de Oro.
En 1526 compró al clérigo Francisco de Salinas un censo de 19 fanegas y media de pan terciado del censo que le correspondía sobre el concejo de Valcervalejo, por la mitad de la alquería de la Nava.
El 6 de abril de 1527 Íñigo y su esposa obtuvieron el permiso de Carlos I para enajenar la villa de Gelves, de la que se habían apoderado los Téllez-Girón. Dos meses después María vendía Gelves (probablemente por encontrarse lejos del resto de posesiones) a Jorge de Portugal, camarero mayor de Carlos I por 10 000 000 de maravedís, de los cuales 103 000 fueron pagados con un juro. Este dinero pasó a formar parte del mayorazgo de Tovar.
Gobernador de los reinos hispánicos y enfrentamiento contra los comuneros[editar]
El 9 de septiembre Carlos I, por encontrarse de camino hacia Alemania, le nombró gobernador de España en unión del cardenal Adriano de Utrecht y del almirante de Castilla Fadrique Enríquez, combatiendo en la Guerra de las Comunidades de Castilla, y al mando de las huestes reales les derrotó en Villalar. Es conocida su respuesta a los comuneros que le pedían que no aceptase el cargo de regente, a lo que contestó que su casa se había hecho sirviendo a los reyes de Castilla, por lo que en defensa del emperador perdería la última gota de su sangre.
Fue Capitán General de Guipúzcoa y ayudó a Carlos I en sus guerras contra Francia. Tras la derrota de Francisco I encargaron a Íñigo la custodia de los delfines entregados al Emperador como garantía de que el tratado de Madrid de 1526 sería cumplido.
Fallecimiento[editar]
Hizo testamento en Burgos el 10 de enero de 1527. En él manda que le sepulten en la capilla del Condestable de la Catedral de Burgos ante el altar de Santa Ana, porque aunque había jurado enterrarse en el Monasterio de Santa Clara de Medina de Pomar, había logrado del Papa la relajación de este juramento para poderse enterrar donde quisiese.
El 30 de noviembre de 1527 falleció su esposa.
Cuatro días antes de su muerte había otorgado once codicilos. En uno de ellos ordenaba que le enterrasen en el Monasterio de Santa Clara de Medina de Pomar destinando 500 000 maravedís para sus exequias fúnebres.
En su mausoleo del Monasterio de Santa Clara se halla la inscripción:
Aquí yacen los muy ilustres señores don Iñigo Fernández de Velasco, Condestable de Castilla y Gobernador que fue destos reynos y la duquesa doña María de Tovar, su mujer. Falleció el dicho señor Condestable en Madrid, jueves a diecisiete días de sept.bre del nac.to de N. Ro Salvador Jesucristo de 1528, en edad de 66 años. Y la dicha S.Ra Duquesa en Ampudia, sábado postrero de noviembre de 1527 en edad de 64 años. Quorum anima sine fine. Requiescant in pace. Amen
En 1529 su hijo Juan de Tovar fue nombrado marqués de Berlanga por Carlos I, como agradecimiento de los servicios prestados por Íñigo a la Corona.
Descendencia[editar]
Estuvo casado con María Tovar, señora de Berlanga, con quien tuvo seis hijos:
- Pedro Fernández de Velasco y Tovar, quien heredaría sus títulos.
- Juan de Tovar, primer marqués de Berlanga.
- Mencía de Velasco, condesa de Oñate. Fundadora del Hospital de Briviesca.
- María de Velasco, abadesa del monasterio de Santa Clara de Medina de Pomar.
- Isabel de Velasco, marquesa de Elche. Casada con Bernardino de Cárdenas, segundo duque de Maqueda.
- Juana de Velasco y Aragón. Madre de Íñigo de Borja y Velasco
También tuvo una hija natural:
- María Sáenz de Velasco, casada con el capitán español Pedro Martínez de Rivilla.
Pedro Girón (1422/1423-Villarrubia de los Ojos, 2 de mayo de 1466),1 también conocido como Pedro Girón de Acuña Pacheco, señor de Briones, maestre de la Orden de Calatrava (1445-1466) y I señor de Ureña, fue un personaje de la corte de Enrique IV de Castilla, hermano de Juan Pacheco y sobrino del arzobispo de Toledo Alfonso Carrillo.
Pedro Girón se hizo con los señoríos y propiedades que conformarían la inmensa riqueza del condado de Ureña y del ducado de Osuna, creado en la figura de su bisnieto Pedro Téllez-Girón y de la Cueva.
Biografía[editar]
Fue hijo de Alfonso Téllez Girón y Vázquez de Acuña, señor de Belmponte y Frechoso, y María Pacheco, hija del primer señor de Belmonte (Cuenca), Juan Fernández Pacheco.1
Pedro Girón y su hermano mayor Juan Pacheco1 se criaron como pajes en la casa del condestable Álvaro de Luna y crecieron junto a Enrique IV al que asesoraron durante muchos años, acrecentando su propio poder y acumulando una gran fortuna.
Apoyado por su hermano Juan, hombre de confianza del joven infante, tuvo un ascenso meteórico en la corte. Pasó rápidamente de paje a oficial de cuchillo de su mesa,1 camarero mayor y notario mayor de sus reinos (Castilla y León) y en 1444 fue nombrado alguacil de Medina del Campo. Entre 1445 y 1448 Pacheco y Girón lograron crear una extensa heredad, a costa en buena parte de los infantes de Aragón.1
En 1445, tras la batalla de Olmedo, se le hace donación a Pedro de las villas de Tiedras y Ureña1 por cédula de 25 de junio de 1445, dada en Medina del Campo. Además, en el marco de un pacto firmado el 2 de septiembre de ese mismo año, Pedro Girón fue nombrado maestre de la Orden de Calatrava;1 contaba entonces con apenas 25 años de edad. En 1448 el príncipe Enrique, concede a Girón la estratégica villa de Peñafiel.
Enrique IV hereda el trono de Castilla en 1454, en su etapa como rey le dona e instituye como I señor de las villas de Osuna, Briones, Frechilla, Morón de la Frontera, Archidona (en cuya conquista había participado), El Arrabal, Cazalla de la Sierra, Gelves, Olvera, Ortejicar, Villafrechós, Villamayor, Gumiel de Izán y Santibáñez y Jódar en Jaén. En 1454 se consolidaría también en el Maestrazgo de Calatrava, desde ese año y hasta su muerte en 1466 él y su hermano Juan Pacheco dominarían la escena política, siendo los personajes más influyentes y poderosos de Castilla y León. Participó en numerosas ligas nobiliarias encabezadas con éxito por su hermano Juan y apoyadas por su tío el arzobispo de Toledo Alonso Carrillo1 y fueron, entre los tres, los artífices de las diferentes ligas.
En 1456 fue capitán general de Andalucía durante la campaña contra Granada.
Pedro Girón era señor de Belmonte pero carecía de título nobiliario. Para preservar estos señoríos instituyó mayorazgo el 2 de mayo de 1466, a favor de su hijo Alfonso Téllez Girón de las Casas habido de sus relaciones con Inés de las Casas1 y que había sido legitimado por Bula pontificia el 22 de abril de 1456 (Pio II) y posteriormente por Enrique IV, mediante real cédula el 30 de abril de 1459.
A partir de este año y aprovechando su solvente patrimonio compra diversas villas, en primer lugar la de Gelves, a María de Guzmán y su hermano Pedro de Guzmán, así como la fortaleza de Ayamonte (para su primogénito) y Villafrechós.
En 1460 Enrique IV le dona las villas de Fuente Obejuna y Bélmez, que permutaría con la Orden de Calatrava por Osuna, una de las principales encomiendas de la orden y Cazalla.
El rey de Navarra se apoderó de las tierras de Logroño en tiempo de Enrique IV, pero el ejército al mando de D. Pedro Girón (o de Gonzalo de Saavedra) la recuperó en el mes de mayo de 1461, convirtiéndose Pedro en Alcaide de dicha villa.
A lo largo de su vida acumuló un grupo de villas y territorios que con el tiempo darían origen a dos títulos nobiliarios, en primer término sobre su hijo, el de Conde de Ureña (el 25 de mayo de 1464), con Grandeza de España desde 1520, grandeza que se subrogaría varias generaciones después, en el título de duque de Osuna. A su muerte era señor de Briones, Tiedra, Urueña, Peñafiel, Gelves, Morón de la Frontera, Osuna, Villafrechós y otros lugares.
En 1461 la influencia de Beltrán de la Cueva en la corte se vio consolidada al entrar a formar parte del Consejo del rey, desplazando a Juan Pacheco, I marqués de Villena, como privado de Enrique IV, desencadenando una importante reacción de buena parte de la nobleza. Entre 1463 y 1464 se formarían al menos cuatro ligas, comenzando con una oposición frontal a la política exterior del monarca y finalizando en la amplia Liga de Burgos (septiembre de 1464), que logra imponer al monarca ese mismo año los humillantes Pactos de Cabezón.
El 16 de enero de 1465 se dicta la Sentencia arbitral de Medina del Campo, que no acepta Enrique IV, y como reacción el 27 de abril del mismo año la liga proclama rey a Alfonso, hermanastro del rey. El nuevo rey nombró a Pedro Girón virrey de Andalucía.2
En 1466, tras la Farsa de Ávila, el rey Enrique le propone un trato: a cambio de pasarse a su bando, se casará con la princesa Isabel de Castilla. Para poder contraer matrimonio renuncia al cargo de Maestre de Calatrava a favor de su hijo bastardo, Rodrigo Téllez Girón, que entonces era un niño de tan sólo ocho años. Pedro Girón moría inesperadamente poco después, el 2 de mayo de 1466, en la localidad de Villarrubia de los Ojos (al parecer de un repentino ataque de apendicitis) cuando iba camino desde Almagro (Ciudad Real) a Ocaña,1 al frente de un ejército de 3000 hombres, para formalizar la petición de mano.
El maestre fue enterrado en el castillo-convento de Calatrava, en la capilla que había mandado hacer.1 Su muerte haría perder peso político a su hermano Juan Pacheco, en favor de los Mendoza.
Como maestre de la Orden de Calatrava hizo perder a esta orden unos 2000 kilómetros cuadrados, la mayoría en favor propio, de sus hijos o de su hermano Juan, constituyendo con ello una de las casas nobiliarias que se situó entre las más ricas del reino hasta el siglo XIX.
Descendencia[editar]
Como maestre de Calatrava debía de permanecer célibe, pero tuvo tres hijos con Inés de las Casas,1 que serían legitimados por Enrique IV y por el papa Pío II en 1459:
- Alfonso Téllez-Girón de las Casas, que heredó el mayorazgo hecho por su padre y fue nombrado conde de Ureña,1 pero murió en 1469 a la edad de dieciséis años.
- Rodrigo Téllez Girón, que sucedió a su padre como maestre de la Orden de Calatrava.1 Murió en 1482 herido en batalla con 26 años de edad.
- Juan Téllez Girón, que a la muerte de su hermano Alfonso heredó sus propiedades y el título.1 De él descienden el general comunero y III Conde de Ureña Pedro Girón y Velasco y Juan Téllez-Girón, el Santo, IV conde de Ureña.
También tuvo una hija de su relación con Inés de Meneses:1
- Inés Girón, dama de la reina Isabel la Católica, que fue una de las esposas de Francisco Enríquez de Quiñones,1 señor de la Vega de Ruy Ponce. Su sepulcro se halla en el convento de Santa Isabel de los Ángeles de Córdoba. Murió sin descendencia.3
Y otras dos hijas:
- María Girón1
- Isabel Girón
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