sábado, 15 de enero de 2022

HISTORIA DE ESPAÑA

 ÉPOCA MEDIEVAL

Andrés de Li o de Helí (Zaragoza, mediados del siglo XV – ?, después de 1521) fue un matemático y escritor español.

Vida[editar]

Grabado de Repertorio de los tiempos (1492) que muestra las partes del cuerpo con los signos del zodiaco correspondientes:3
Aries significa la cabeça.
Taurus el pescueço.
Geminis los braços.
Cancer los pechos.
Leo el coraçon.
Virgo el vientre.
Libra las ancas.
Scorpio los genitals.
Sagitario las piernas.
Caprocorno las rodillas.
Aquarius la spinilla.
Piscis los pies.

Es muy poco lo que se sabe de Andrés de Li. En la edición de 1495 del Repertorio de los tiempos Pablo Hurus se refiere a él como «ciudadano de Zaragoza». Latassa se refiere a él en 1796 como «hijo y ciudadano de Zaragoza, varón piadoso y literato». Se cuenta entre los intelectuales que se reunían en torno al editor Pablo Hurus, entre los que estaban Gauberte Fabricio de VagadGonzalo García de Santa MaríaMartín GarcíaMartín Martínez de Ampiés y Antonio Geraldini, este último, entre otras figuras italianas.42

Lo poco que se sabe es que en 1478 ejercía como mercader.2​ También se sabe que procedía de una familia de judíos conversos y que tuvo problemas con la Inquisición en 1490, por lo que estuvo preso.1

En 1480 hizo un primer testamento, que reescribió en 1521, dando unas segundas últimas voluntades.2

Obra[editar]

Tras su paso por prisión, Li escribió diversas obras piadosas. El Thesoro de la Pasión Sacratísima de nuestro Redemptor Jesu-Christo de 1494, está dedicada a los Reyes Católicos. La Summa de la Pasciencia de 1505 está «dirigida a la Serenisima y muy Ilustre Señora doña Isabel de Castilla y Aragón, Princesa de Portugal, por su devoto y muy afectado servidor, ciudadano de Zaragoza», que en ediciones posteriores sería publicado con los Proverbios de Séneca. También escribió una Vida de San Gerónimo y Santa Paula que fue editada.1

Repertorio de los tiempos[editar]

Andrés de Li tenía interés por la astrología, por lo que estuvo en contacto con Bernardo de Granollach, un astrónomo y astrólogo de Barcelona, autor de un Lunario. Li también estaba en contacto con el plantel científico de la Universidad de Salamanca, sobre todo con el catedrático de astrología Sancho de Salaya y con el matemático, astrónomo e historiador Abraham Zacuto. Con estos antecedentes y con ayuda directa de Salaya, Li amplió y revistió de un marco teórico la obra de Granollach con su Repertorio de los tiempos (1492). En sí, el Repertorio de los tiempos es una mezcla amena y subyugante de astronomía e ideas científicas y de astrología y consideraciones sobre el calendario.15

La primera edición del Repertorio fue en 1531, en Burgos, y en ella el Lunario de Granollach, con los datos de 1531 hasta 1550, formaban la última parte. Se editó de nuevo en Zaragoza en 1534, que fue empleada por Bartolomé Gutiérrez en su Año Xeritcense de 1755. Una tercera edición es de 1546 en Toledo, en la que Sancho Salaya añadió 22 años a las listas del Lunario. Llegó a editarse en 1977, en Barcelona, «nuevamente corregido y añadido en muchas partes y cosas muy necesarias, según por él se verá también del octavo cielo, y lo que contiene, del que fasta agora no se hacía mención en otros repertorios. Así mesmo una figura, por la cual podrás conocer de noche, por el norte, qué hora es, la cual es cosa bien provechosa y que muchos desean saber».







Francisco Maldonado da Silva o Eliahu Hanazir (San Miguel de Tucumán, Argentina 1592 - Lima, Perú 1639) fue un médico que pasó su vida entre las actuales Argentina, Chile y Perú. De condición cristiana nueva, fue acusado de judaizante y hereje por la Inquisición, condenado y ejecutado en hoguera en Perú.

Biografía[editar]

Maldonado da Silva nació en Argentina. Provenía de una familia judeoconversa de Portugal, es decir, cristianos nuevos que mantenían el judaísmo en secreto. Tanto su padre, Diego Nuñez da Silva, también médico, como su hermano mayor Diego Maldonado da Silva, habían sido llevados ante el tribunal de la Inquisición por sus prácticas criptojudías.

Estudió medicina en la Real Universidad Pontificia San Marcos de Lima donde se tituló como médico para luego ejercer su profesión en la ciudad chilena de Penco, siendo considerado como el primer médico de la ciudad y en donde se erigió un monolito en su memoria.

Sobre la base de las acusaciones formuladas incluso por miembros de su familia que declaraban que Francisco observaba los rituales judíos, entre ellos el Shabat y festividades como Yom Kipur, Francisco Maldonado Da Silva fue apresado de noche, llevado a Lima y encarcelado en una celda del convento de Santo Domingo el 29 de abril de 1627, permaneciendo bajo proceso por seis años.

Durante el juicio sorprendió a los inquisidores con su erudición judaica recitando de memoria capítulos enteros de la Torá y de los Salmos. Fue sometido a intensas torturas, sin lograr su abjuración. Se le condenó a ser quemado vivo en la hoguera, sentencia que se cumplió junto a la de otros nueve condenados en un auto de fe que tuvo lugar en Lima el día 23 de enero de 1639.

Novela histórica[editar]

Francisco da Silva es el protagonista de dos novelas históricasLa Gesta del Marrano (1991) del escritor argentino Marcos Aguinis, y Camisa limpia (1989), del chileno Guillermo Blanco.







Rodrigo Méndez Silva (Celorico da Beira, 1606-Venecia, 1670) fue un historiador, genealogista y geógrafo hispano-portugués de origen judeoconverso, «coronista general de España, y ministro del supremo Consejo de Castilla».

Pedro de Villafranca: Retrato de Rodrigo Méndez Silva, de edad de 33 años. Ilustración de Vida y hechos de Nuno Alvarez Pereyra, por Rodrigo Méndez Silva, 1640. Biblioteca Nacional de España.

Biografía[editar]

Según la información obtenida por Révah de su proceso inquisitorial y de los procesos de otros familiares, fue el cuarto y último hijo de Henrique Mendes Silva y Ana Guterres; nieto, por la parte de su padre, de Antonio Mendes y Francisca Silva y por la materna de Miguel Fernandes Guterres y Branca Gomes, todos de Celorico excepto el abuelo materno que lo era de Castilla, y vivían de su hacienda «de viñas y olivares y otras cosas».2​ Aunque en su proceso ante el tribunal de la Inquisición declaraba descender de cristianos viejos y que ninguno de sus familiares había sido encarcelado por el Santo Oficio, lo cierto es que entre sus primos, según las investigaciones de Reváh y aunque en sus declaraciones ante la Inquisición no los mencionase por no recordarlos, se encontraban el doctor Miguel de Silveira, autor de El Macabeo, muerto en Nápoles a donde se había retirado prudentemente siguiendo al duque de Medina de las Torres tras el arresto en Madrid de sus parientes, y su hermana, Catarina Gomes da Silva, casada con Diogo Mendes Ximenes, detenidos en Madrid en 1635 junto con sus hijos y otros familiares.2

Tras aprender a leer y escribir con un cura y un sacristán en el mismo Celorico, contrajo matrimonio con diecisiete años con Clara Gómez Feijóo y vivió con ella de su hacienda en Celorico hasta que en 1635 se trasladó a Madrid llamado por Diego Suárez, del Consejo de Portugal.3

Establecido en Madrid de 1635 a 1659, escribió en castellano un elevado número de obras, principalmente genealogías. En 1637 salió la primera edición de su Chatalogo real de España, elogiado por Lope de Vega con un soneto laudatorio,4​ al que se agregaron al salir la segunda edición en 1639 los elogios en verso de Pedro Calderón de la BarcaAgustín MoretoLuis Vélez de Guevara y otros. Entre sus obras cabe destacar, por la cantidad de información que contiene, la Población general de España: sus trofeos, blasones, y conquistas heroycas...; Reales genealogías, y catálogos de dignidades eclesiásticas, y seglares, impresa en Madrid por Diego Díaz de la Carrera, 1645, con dedicatoria al banquero portugués afincado en Madrid Manuel Cortizos, defensor de la unidad peninsular. La obra venía a continuar y completar las Relaciones topográficas de Felipe II, ofreciendo la descripción general de España que ni Ambrosio de Morales ni Juan Bautista Labaña pudieron completar y le valió el título de cronista.56​ También se pueden recordar sus Engaños y desengaños del mundo, 1655, acerca del fundamento de la vanidad nobiliaria, y Parangón de los Cromueles de Inglaterra, 1657, su última obra publicada, donde defendía el catolicismo hispano frente a la hereje Inglaterra.7

Proceso inquisitorial[editar]

El 7 de mayo de 1659 fue denunciado junto con su esposa por Guiomar Mendes, cristiana nueva portuguesa perseguida por el tribunal de la Inquisición de Cuenca, tras ser sometida a una sesión de tortura. Otros testimonios se agregaron luego, acusándolo de haber participado en Portugal en la muerte ritual de un niño. Entre quienes lo habían oído decir se encuentra el licenciado Francisco Páez Becerra, célebre por sus labores de espionaje entre los criptojudíos de Ámsterdam, Burdeos y Madrid, a quien Rodrigo acusará en su proceso de haberle chantajeado. El 11 de mayo fue arrestado y días después hizo sus primeras declaraciones espontáneas en su descargo. El 30 de ese mes se procedió al inventario y secuestro de sus bienes, entre ellos una biblioteca formada por mil doscientos volúmenes entre libros impresos y manuscritos.8​ El 7 de julio se celebró el primer interrogatorio oficial. En él reconoció que entre sus libros, ninguno relacionado con el judaísmo, podían encontrarse algunos prohibidos, como las «Epístolas y Evangelios en Romance por fray Ambrosio Montesinos, en Alcalá, año de 1608», pero alegó que es porque, no sabiendo latín –ni hebreo o griego pues solo ha estudiado historia particularmente— los necesitaba para su oficio y sin ellos no hubiera podido escribir, con muchos pasajes del Nuevo Testamento, «contra la tiranía de Cromuel de Inglaterra, persuadiendo a aquel Reyno a la desconveniençia grande de tenerlo por protector».3

Trasladado al tribunal de Cuenca, el 30 de agosto se le dio lectura de la acusación formulada contra él por el fiscal. Confesó entonces que haría como doce o trece años el doctor Fernando Cardoso, médico de Madrid huido a Italia, «amigo suyo y de grande confianza», le había convertido al criptojudaísmo y que durante un tiempo había tenido dudas, manteniéndose unas veces firme en la Ley de Cristo y otras dudoso de cuál ley fuera mejor.9​ Pero pasados dos o tres años leyó el Dialogo entre Discípulo y Mestre catechizante del judío renegado João Baptista Este, «onde se resolven todas as duuidas que os Judeus obstinados costumão fazer contra a verdade da Fé Catholica», y «bolbio en sí y reconocío que yba errado», retornando al catolicismo hasta que, hacía tres años, otro «Marrano» llamado Francisco del Oyo, alias Henríquez, le dijo que todo lo que decía el libro de Este «eran pataratas» y le persuadió de guardar el sábado y abstenerse de comer tocino, lo que hizo «todas la veces que podía, sin ser notado».10​ El 13 de octubre se ratificó en sus declaraciones, incluidas las que suponían la delación de otros tres cómplices, y se reafirmó en recusar a Guiomar Mendes, que lo había acusado, cerrándose así provisionalmente la causa en el tribunal de Cuenca con la admisión del reo a reconciliación, imponiéndole la abjuración de sus errores en auto particular de fe y la confiscación de sus bienes.11​ Sin embargo, el Consejo de la Suprema discrepó de esta decisión por entender que sus confesiones había sido insuficientes y ordenó someterlo a tormento. El interrogatorio tuvo lugar el 27 de febrero de 1660 y fue publicado por Julio Caro Baroja.12​ Entre exclamaciones de dolor y reivindicándose –«España esclarecida, mira que te he servido y que he respondido a las heregías de Cromvel»– nombró a algún otro cómplice y protestó contra las acusaciones de muerte ritual a las que, por otro lado, los inquisidores no parecen dar mayor crédito.13​ El 25 de junio de 1662 se le leyó la sentencia definitiva, por la que era condenado a prisión perpetua y a portar perpetuamente sambenito. No firmó por tener «baldado el brazo derecho». El 28 de marzo de 1663 el gran inquisidor cambió la sentencia contra él y su esposa por la de destierro de Madrid con prohibición de abandonar España o cambiar de nombre. No obstante, al menos él escapó a Italia.14

Una vez en Venecia, a pesar de sus años, se hizo circuncidar y tomó el nombre de Jacob, contrayendo matrimonio con una joven de dieciocho años, motivo por el que sus correligionarios burlonamente y sin motivo, según escribía Cecil Roth en 1930, cambiaron su título de cronista por el de cornista.15​ Roth tomaba su información de un fraile polemista italiano, fra Luigi Maria Benetelli, que concluía sus menciones a Rodrigo Méndez diciendo de él que «como Averroe, che non era Idolatra, nè Maomettano, nè Ebreo, nè Cristiano».







Cristóbal de Mesa (Fregenal de la Sierra, 15 de octubre de 1556Madrid27 de septiembre de 1633), poeta español del Siglo de Oro, perteneciente al manierismo.

Biografía[editar]

Aunque tradicionalmente se le ha considerado natural de Zafra, recientes investigaciones han esclarecido su nacimiento en Fregenal de la Sierra en 1556.1​ Era de orígenes judeoconversos. Su familia se hallaba ligada al servicio de la noble casa de Feria. Estudió en Salamanca, donde tuvo como profesor al famoso humanista Francisco Sánchez de las Brozasel Brocense, comentador de las obras de Juan de Mena y Garcilaso de la Vega. Más tarde residió en Sevilla, donde se relacionó con el famoso poeta Fernando de Herrera, también comentador de Garcilaso, Luis Barahona de SotoFrancisco Pacheco y Francisco de Medina, de quienes se declaró discípulo. Pasó luego a Italia en 1586 y estableció una estrecha amistad durante cinco años con Torquato Tasso, de quien proviene su devoción por lo clásico y su afición a la épica culta; en efecto, tradujo su Jerusalén libertada(Madrid, 1587). Regresó en 1591 a España convertido ya en sacerdote y fijó después su residencia en Madrid. Allí intentó acercarse a algunos personajes influyentes, a los que sirvió comno preceptor y capellán, para granjearse un beneficio que le permitiera dedicarse a la poesía: el conde de Lemos y el duque de Béjar, con poco fruto. Trabó sin embargo amistad con Miguel de Cervantes, cuyas ideas estéticas clasicistas sobre el teatro compartía. Por eso en la polémica sobre la nueva fórmula dramática de Lope de Vega ambos se declararon contra ella.

Obra[editar]

Mesa realizó una traducción de la Ilíada que no se conserva y toda la obra de Virgilio (publicó su traducción de la Eneida en 1615 y Las Églogas y Geórgicas de Virgilio en 1618). Fue un escritor fecundo. Escribió dos poemas épicos, uno en veinte cantos, Las Navas de Tolosa, (1594), donde la sujeción al modelo italiano del Tasso no impide que existan momentos de gran inspiración y originalidad como la descripción del Infierno o la prolongada historia de los amores de Abdalla y Xarifa, y otro en diez, La restauración de España (1607), en torno a los sucesos de Covadonga y los primeros momentos de la Reconquista. En El patrono de España (1612) recogió las leyendas relacionadas con el apóstol Santiago para elaborar otro poema que podríamos llamar épico-religioso, y en Valle de lágrimas y diversas rimas (impreso en Madrid, 1607, pero acabado alrededor de 1604) recogió sus poemas satíricos, líricos, el paisaje de su natal Extremadura y los tópicos clásicos de Horacio, cuya Arte poética tradujo en verso (Compendio del Arte poética, 1607). Escribió también varias tragedias que obedecen las tres unidades aristotélicas, como El Pelayo o El Pompeyo, de las que solamente se conserva esta última.

El estilo de Mesa es abundante en correlaciones trimembres, rasgo típico de la poesía manierista, y abunda en huellas textuales de Garcilaso, Herrera y el Tasso.







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